ZAFRÁN LANZA SUS PRIMERAS BARRAS VEGANAS

Zafrán presenta dos nuevas recetas de barras, una de Arándanos y almendras, otra de Chocolate y quinoa, que avanzan por el camino de los superalimentos, esos que con poco volumen pueden nutrir mucho. Después de lanzar zafranito, su nueva línea de productos orgánicos para chicos y chicas, de lograr la Certificación B, que la reconoce como empresa buena para el mundo, y haber sumado recientemente una línea de ingredientes en envases compostables, zafrán sorprende con sus primeras barras veganas. De esta manera, la marca comprometida con mejorar el mundo a través de la alimentación continúa su crecimiento en el contexto de pandemia con un fuerte compromiso en la producción responsable.

Barras veganas y con superalimentos  

Las nuevas recetas diversifican el porfolio de barras de Zafrán. Las anteriores combinaban frutos secos, fruta deshidratada, semillas, azúcar de mascabo y miel. Las nuevas barras no tienen miel. Este giro muestra un avance en todos los frentes hacia la producción responsable. Los nuevos sabores son Chocolate y quinoa y Arándanos y almendras. En estos nuevos productos incluyeron varios “superalimentos” como la quinoa, el arándano, el chocolate, el arroz yamaní integral, logrando siempre productos ricos y nutritivos.  “Los superalimentos son en su mayoría alimentos que en pequeños volúmenes nos aportan gran cantidad de nutrientes. Deben por definición cumplir con al menos tres requisitos. Ser fuente de fibra, vitaminas, minerales; con alto contenido en fitonutrientes y compuestos antioxidantes como las vitaminas A y E y el betacaroteno. Todos esos factores hacen que los superalimentos puedan ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y otros trastornos de salud. También permiten a nuestro cuerpo fortalecer el sistema inmune, ayudan a desintoxicarlo y, además, reducen el riesgo de enfermedades crónicas”, explica Antonella Robledo Irigoyen (Lic. En Nutrición MP 2151).

Pero además de sumar nuevos superalimentos estas son las primeras barras veganas de zafrán. “»En 2016, un vegano nos escribió a zafrán cuestionándonos el uso de la miel y tratándonos de esclavistas de abejas. Nos descolocó y dejó pensando. Poco tiempo después nos interiorizamos sobre apicultura responsable y el veganismo comenzó a ser parte de nuestro diálogo. Hoy estamos dando un paso más. Es un gusto lanzar, nuestras primeras barras sin miel, aptas veganas. Creemos que comer mejor es antes que nada una celebración compartida, placentera y consciente de todos los procesos detrás la comida. No nos sale mirar para otro lado, en ningún aspecto de la producción. Queremos atender el  impacto económico, social, ambiental, la salud de las personas y también el interés de los animales», cuenta Nito Anello, cofundador de zafrán.

La empresa zafrán también es socio adherente y participó de la formación de la nueva Asociación de Productores de Alimentos a Base de Plantas, que agrupa a 80 empresas que representan más del 90% de la producción a base de plantas del país.

Una barra con historia. 

Las barras de frutos secos y semillas son un emblema de zafrán, empresa pionera en la categoría en el mercado argentino. Habiendo introducido la propuesta en 2017, tuvo una muy buena recepción en un público ávido de snacks ricos y nutritivos. “Las barras no tardaron en transformarse en el producto estrella de la marca, complementando su porfolio de galletitas dulces integrales, granolas caseras, mix de frutos secos e ingredientes”, dice Nito Anello, co-fundador de zafrán.

En 2019, zafrán inauguró su primera planta propia de producción de barras en Villa Lynch, Buenos Aires. Para una empresa de triple impacto todos los pasos se dan en tres niveles: el económico, el social y el ambiental. La producción responsable considera desde cuestiones de ahorro energético o envases hasta el compromiso de brindar trabajo inclusivo. “Desde 2014 cocinamos y envasamos nuestras granolas junto a la Asociación Civil Granja Andar, que brinda oportunidades laborales y de desarrollo integral a personas con discapacidad. El trabajo inclusivo es parte del ADN de zafrán. Nuestra primera planta de barras nos dio la oportunidad de continuar en la misma línea. En este caso decidimos brindarle una segunda oportunidad de reinserción a personas que pasaron por situación de encierro. No es el camino fácil, pero es el más lindo”, comenta Nito Anello.

La constante búsqueda de una alimentación superadora, los procesos y la transparencia en sus productos y sus procesos, la vocación de escucha y aprendizaje, hacen que zafrán sea percibida como una empresa honesta y pionera en el sector.

El portfolio actualizado de barras zafrán  

Chocolate y quinoa (vegana)

Arándanos y almendras (vegana)

Almendras y coco: Maní, almendras, coco, azúcar de mascabo, girasol y miel. Y nada más.

Maní y cacao: Maní, azúcar de mascabo, chia, miel, sésamo y cacao amargo. Y nada más.

Manzana y chía: Maní, manzana, almendras, azúcar de mascabo, girasol, chia, miel y jengibre. Y nada más

Cajú y semillas de zapallo: Maní, azúcar de mascabo, almendras, castañas de cajú, zapallo, sésamo y miel. Y nada más.

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