Carmen, el nuevo pastificio de estilo londinenses, llega a Palermo

Nacho Feibelmann, cocinero rosarino que participó de MasterChef, es quien comanda la cocina de este nuevo pastificio en Gurruchaga 1426, Palermo, con una impronta muy marcada en los sabores londinenses. Junto a amigos amantes de la gastronomía crearon un proyecto que conjuga fábrica de pastas y restaurante, implantado en una pintoresca esquina. 

Desde su fachada se puede vislumbrar el pequeño pastificio a través de amplios ventanales donde los cocineros realizan la pasta día a día. Dentro del local el ladrillo a la vista es el protagonista junto a delicadas mesas de madera, pisos de loza y amplios ventanales que brindan mucha calidez. Una barra, también de ladrillo, separa el salón de la cocina a la vista, la cual permite vislumbrar cómo los cocineros trabajan en silencio en las preparaciones de la carta. Cuentan con un pequeño jardín de invierno, rodeado de plantas, ubicado al final del salón, y un deck con mesas y elegantes sillas en la vereda, resguardado por un gran toldo. 

Feibelmann siempre fue un apasionado de las pastas, y en su nuevo restaurante quiso transmitir los sabores que lo acompañaron en su infancia, como los spaghettis emulsionados en manteca que le hacía su abuela Carmen o las pastas rellenas de pacú que preparaba junto a sus amigos cuando le sobraba pescado del asado. De esta manera, la impronta de Carmen se destaca por su estilo londinense, con mucha manteca, cítricos, colores y rellenos disruptivos.

La carta propone comenzar con el gran raviolón frito con centro de yema, mucha muzzarella, pesto y olivas negras, y la tortilla de papas (bien babé, como le gusta a Feibelmann). En cuanto a los principales, se puede optar entre hay seis pastas: los tortelli de pesca de río hecho al kamado con manteca de lemongrass; la girandolla rellena de batata asada con parmesano, castañas, manteca y menta; los capelleti de remolacha con provolone, pan gratatto, manteca y lima; el rotolo de acelga, espinaca y ricota con parmesano y passata y, por último, las cintas al huevo con caccio e peppe acompañadas con una imponente costilla hecha al kamado. 

Para terminar, proponen dos postres frutales: ananá con crumble especiado, yogourt y piel picante; y una pequeña tarteleta de frutillas, queso de cabra y mermelada de tomates.

La carta de vinos fue realizada por la sommelier y periodista especializada Sorrel Moseley Williams, con una propuesta de unas 26 etiquetas con varios estilos como pét-nat, naranjos, rosados, una pequeña selección de blancos, tintos ligeros y corpulentos.